Balsas salvavidas
Existen elevados requisitos y normativas legales para equipar barcos y yates con balsas salvavidas. Una balsa salvavidas es indispensable para los yates que navegan en alta mar, pero también tiene sentido en las zonas costeras. Sólo una balsa salvavidas puede salvar vidas en caso de emergencia en el mar si el barco se pierde o se hunde. Ofrece seguridad y protección a la tripulación hasta que llega el rescate. Permite un mayor tiempo de supervivencia y también protege contra el oleaje y el frío.
Las características más importantes de las balsas salvavidas
Las balsas salvavidas se diseñan y equipan de forma diferente según la zona y los requisitos del crucero. En el caso de las balsas para uso en alta mar, los cuerpos de flotabilidad constan como mínimo de un sistema de mangueras de doble cámara. Varias cámaras de aire ofrecen mayores reservas de seguridad en caso de avería y pérdida de presión. Un doble suelo protege contra el frío, un techo contra las salpicaduras y las olas. Con mar agitado, unas bolsas de vuelco suficientemente dimensionadas deben garantizar la estabilidad en el agua y evitar en gran medida que la embarcación vuelque. En caso de vuelco, la isla debe autoadrizarse gracias a la flotabilidad. Anclas de deriva, remos, fuelles y materiales de reparación forman parte del equipamiento estándar de una balsa salvavidas. Un sistema de embarque práctico con escalera de embarque es absolutamente esencial para permitir un embarque seguro y rápido de la balsa. El material de una balsa salvavidas debe ser resistente a la abrasión y a la intemperie y, por supuesto, completamente hermético y estanco. Los plásticos de PVC especialmente soldados también son ignífugos y permanecen flexibles incluso con grandes fluctuaciones de temperatura. Además del equipamiento estándar, una balsa salvavidas puede equiparse con equipos adicionales de supervivencia y emergencia en función del área de operación. Esto incluye un transmisor de emergencia EPIRB, un teléfono móvil VHF, agua, comida y medicamentos. Las balsas salvavidas son una buena alternativa para los yates que viajan cerca de la costa o en grandes vías navegables interiores si se espera un rescate rápido.
El convenio internacional de la OMI con las disposiciones SOLAS regula la obligación de equipar los buques con balsas salvavidas. Deben estar certificadas conforme a las normas ISO y contar con la aprobación de la ISAF. Las balsas salvavidas son obligatorias para la navegación comercial y para la de recreo, cuyo equipamiento es obligatorio. Esto incluye también, por ejemplo, los buques de alquiler, los yates de entrenamiento y las embarcaciones tradicionales.
Almacenamiento de balsas salvavidas
Las balsas salvavidas se suministran en una bolsa de embalaje o en un contenedor rígido. Las bolsas de embalaje son más flexibles y fáciles de guardar. Sin embargo, también son más sensibles a la presión y a los daños. Las balsas salvavidas deben inflarse automáticamente incluso a temperaturas bajo cero y altas temperaturas. No obstante, deben guardarse en un lugar seco y sin escarcha durante el almacenamiento invernal. Así se evita la formación de condensación y los daños causados por la congelación de la humedad en el contenedor.
Debes tener esto en cuenta
El tamaño de la balsa salvavidas depende del número de personas que viajen habitualmente a bordo. Debe coincidir exactamente con el tamaño de la tripulación. Si la balsa salvavidas es demasiado grande, los náufragos encontrarán poco apoyo. Por otra parte, cuanto más apretados y cerca estén sentados, menos espacio habrá para maniobrar. El lugar a bordo donde se instala una balsa salvavidas depende de su tamaño y del diseño de la embarcación. Como norma general, una balsa salvavidas debe ser rápida y fácil de desplegar en caso de emergencia. El mejor lugar para ello es la cubierta. Las balsas salvavidas en alforjas, por ejemplo, que se guardan en espacios de estiba bajo las literas, no pueden llevarse a cubierta con la suficiente rapidez en caso de emergencia. Existen soportes especiales para balsas salvavidas en contenedores que se pueden montar en cubierta o en la barandilla. Lo ideal es fijarlo al puesto de empuje. Esta es la mejor manera de activar la balsa salvavidas. El contenedor se suelta del soporte y se lanza por la borda. Una cuerda de seguridad, que también activa la liberación, conecta la balsa salvavidas al barco hasta que la tripulación haya subido a bordo. Sólo entonces puede cortarse de la balsa salvavidas. Por razones de seguridad, la cuerda tiene un punto de rotura predeterminado para que la balsa pueda separarse del barco que se hunde y no sea arrastrada.
El funcionamiento fiable de una balsa salvavidas depende en gran medida de un mantenimiento regular. Una balsa salvavidas en cubierta está expuesta a un estrés considerable debido a las temperaturas, la radiación UV y las cargas mecánicas. Cada balsa tiene unos intervalos de mantenimiento especificados por el fabricante. Deben respetarse si no se quiere perder la cobertura del seguro y quedar expuesto a reclamaciones de terceros en caso de daños. El mantenimiento sólo puede ser realizado por empresas especializadas autorizadas. El alcance del mantenimiento incluye la comprobación del estado de la balsa y el depósito, la sustitución de juntas, la sustitución de equipos, la prueba de funcionamiento del cabezal de encendido, la prueba de estanqueidad y la prueba de presión de cada cámara, así como la prueba de funcionamiento de todas las válvulas.